Continuamente escuchamos hablar positivamente acerca de las vitaminas y los alimentos que las contienen. Parece que «cuanto más, mejor». Pero debes saber que, en algunos casos, tomar excesivas vitaminas puede tener consecuencias negativas para tu salud y bienestar; es lo que se conoce como hipervitaminosis.
En el artículo de hoy te contamos en qué consiste este concepto y cómo influye en nuestra nutrición. Así que, sigue leyendo o aprende a prevenir este factor con nuestro Máster de Nutrición Deportiva y Personal Trainer.
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Toggle¿Qué es la hipervitaminosis?
La hipervitaminosis es la presencia excesiva de una vitamina en el organismo, ya sea por haber ingerido demasiados alimentos con ella, tomar suplementos nutricionales de vitaminas u otras condiciones médicas. Normalmente, el cuerpo elimina el exceso de vitaminas por medio de la orina. Es lo que sucede con las vitaminas hidrosolubles, ya que se pueden disolver en agua. Pero en el caso de las vitaminas liposolubles (A, D, E y K), esto no sucede así y pueden acumularse en los tejidos grasos del organismo.
La mejor manera de prevenir un exceso de vitaminas
Lo mejor es seguir una dieta equilibrada y no tener que recurrir a los suplementos vitamínicos, excepto si nos lo ha indicado el médico. Incluso, suplementos naturales como el aceite de hígado de pescado tienen altas cantidades de vitamina A y D, y puede ser que no seamos conscientes de la cantidad de estas vitaminas que estamos tomando.
Además, muchos alimentos que adquirimos en el supermercado vienen con suplementos de vitaminas, como sucede con los zumos, los cereales o los alimentos veganos, y finalmente podemos estar tomando más de una vitamina de lo que imaginamos.
Si sospechas que puedes estar tomando demasiadas vitaminas, lo mejor es que aprendas a detectar los síntomas.
Síntomas del exceso de vitaminas
Como los síntomas que te contamos también pueden deberse a otras causas, ante la duda, es mejor que consultes con el médico. A continuación, te nombramos los signos que se presentan al tener hipervitaminosis en cada tipo de vitamina.
Hipervitaminosis A
Sus signos son mareos, náuseas, vómitos, fatiga, irritabilidad, falta de apetito y desmayos. Desaparecen rápidamente si se toma menos vitamina A. Esto es más frecuente en personas con problemas hepáticos debidos a la toma de medicamentos, hepatitis o una dieta insuficiente en proteínas o energía.
La hipervitaminosis A crónica suele ocurrir en personas que toman suplementos nutricionales durante semanas o años y toman 10 veces más vitamina A que el aporte diario recomendado. Se manifiesta con alopecia, dolor de cabeza, labios agrietados, piel seca y con prurito.
Hipervitaminosis D
Los alimentos que tomamos normalmente no tienen mucha vitamina D, pero puede sucederle a las personas que toman suplementos de esta vitamina, como quienes han de seguir turnos de noche o mujeres que quieren prevenir la osteoporosis cuando tienen la menopausia.
Se ha demostrado que los síntomas ocurren cuando se toman 60 000 UI al día de vitamina D durante varios meses.
Los síntomas que provoca se deben a la calcificación ósea y también del riñón, los pulmones o la membrana del tímpano. Así, puede llegar a causar sordera. También puede provocar dolor de cabeza, deshidratación, falta de apetito, micción frecuente y náuseas.
Algunos lactantes pueden tomar un exceso de vitamina D cuando se les dan alimentos enriquecidos con esta vitamina. Sus síntomas son fragilidad de los huesos, trastornos gastrointestinales, retraso en el crecimiento y retraso mental.
Hipervitaminosis E
Es la vitamina liposoluble menos tóxica, de modo que es muy poco frecuente. La cantidad recomendada de esta vitamina es unos 15 mg al día. Se considera dosis peligrosa los 1000 mg diarios en el caso de adultos, 600 mg al día para adolescentes y 450 mg para niños y bebés. Suele suceder cuando se toman suplementos.
Se manifiesta con hipertensión arterial, dolor abdominal, diarrea, gases e incluso sangrados (ya sea en la piel, en mucosas como la nariz o con moratones), debido a la propiedad anticoagulatoria de esta vitamina. Algunos estudios también demuestran que causa dolor de cabeza, fatiga, náuseas, falta de apetito, visión doble, debilidad o dolores musculares y creatinuria, es decir, el contenido de creatina en la orina.
Hipervitaminosis K
Nuestro organismo es bastante tolerante a la vitamina K y, aunque se encuentra presente en muchos alimentos, es el exceso de vitaminas menos frecuente. Puede causar anemia y afectar al funcionamiento del hígado.
Hay que señalar que la vitamina K se puede transmitir de la madre a través de la placenta o la leche. Por eso, las mujeres embarazadas o en periodo de lactancia deberían tener especial precaución al tomar esta vitamina.
Si padeces exceso de vitamina E, puede que observes coagulación sanguínea irregular (esta vitamina regula la coagulación), ictericia (color amarillento de la piel y los ojos) o problemas de hígado. En el caso de los lactantes, causa afecciones neurológicas.
Tratamiento del exceso de vitaminas
Estos tratamientos únicamente se llevan a cabo si el médico te ha realizado las pruebas necesarias y diagnosticado exceso de vitaminas.
Lo más habitual es dejar de tomar los suplementos o alimentos que la han provocado. En el caso de la vitamina D, el médico también puede recomendar tomar menos calcio y, en ocasiones, recetar corticosteroides o bifosfonatos por vía oral o intravenosa.
Otras hipervitaminosis
En los otros casos, hablamos más bien de efectos secundarios debido al exceso puntual de la vitamina, pues no es preocupante. Las siguientes son las más frecuentes:
- Vitamina C, que puede causar diarrea, náuseas, cólicos abdominales, vómitos, acidez estomacal, insomnio y dolor de cabeza.
- Hipervitaminosis por vitamina B1, puede causar dificultad para conciliar el sueño, hipertensión, irritación de la piel, aparición de alergias, latidos inestables del corazón y nerviosismo.
- Exceso de vitamina B12, que causa insomnio, diarrea, agitación, erupciones en la piel, entumecimiento de los dedos y músculos faciales.
¿Cómo tomar los suplementos multivitamínicos?
Te recomendamos que no los tomes por tu cuenta, solo si te lo recomienda el médico. Comunícale también si crees que estás tomando demasiadas vitaminas porque tienes los síntomas que hemos mencionado.
En cualquier caso, lo mejor es que no tomes estos suplementos durante más de un mes y que tomes las vitaminas en la dieta. No te preocupes si un día no has tomado alimentos con determinada vitamina, pues en el caso de las liposolubles, se pueden almacenar en el organismo.
Como ves, la hipervitamitosis prácticamente solo sucede en personas que toman suplementos. Además, sus efectos dejan de notarse cuando se deja de tomar la vitamina que la provoca.